Sorprendido por una Jauría

Tantos peligros al pasear por la ciudad nos encontramos los que salimos a toparnos con nuestro entorno, que podemos describir como una Jauría que nos quiere devorar sin contemplación: La delincuencia, El tránsito (especialmente a nosotros los peatones), las muestras que en la calle se ven del arbitrario régimen que nos desgobierna (gigantescas pancartas de un Socialismo que nadie quiere). Pero en este caso la jauría que me encontré tenía una artística cordialidad.

Cuando pasaba por la plaza Altamira,  majestuosas esculturas de Leones de tamaño natural, se presentaron a mi vista, me recordaron las razones que debieron haber motivado que se usará este animal como símbolo de nuestra ciudad. La Altivez, El Coraje, La Dignidad, La Nobleza que veía en estas piezas me sorprendió gratamente y me evocaron las virtudes que los Caraqueños, y todos los Venezolanos, debemos cultivar para no acobárdanos ante el atropello ni dejarnos pisotear nuestros derechos.

Del mismo vaciado o prototipo estaban moldeados todos ellos pero las diferentes formas en que fueron tratadas las superficies, por la interpretación de varios artistas, los hacía ver de formas diferentes y sugestivas. Unos se mostraban juguetones, otros mitológicos, otros abstractos, muchos provocadores y algunos hasta apocalípticos.

La Idea fue llevada a cabo por La Alcaldía Mayor en honor a los 444 años de la fundación de nuestra Leonina Urbe.

Quiero dedicar con mucho cariño esta reseña a mi amiga, Artista Plastico, Juty Freites.

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