(Planilla del 2 de agosto de 2016, con Sello de recibido, de Solicitud de recolección de 20% de firmas como último requisito para llamar al Referéndum Revocatorio)
Venezuela
es y será siempre un ejemplo de democracia, e irónicamente lo será hasta en sus
más sombríos momentos como estos en que vivimos actualmente. Lo fue con sus defectos, como una democracia de partidos civiles en la segunda mitad del
siglo XX. Y Lo es ahora desgraciadamente como el camino equivocado que un país
no debe nunca permitirse llegar.
La
constitución del 99 es buena pero tiene una trampa, producto de la efervescencia
política de ese momento, estiraba los periodos y permitía la reelección
inmediata, que luego se agravaría más, con la reelección indefinida.
Eso rompía
un principio que fue una de los éxitos de nuestra democracia hasta ese momento:
La alternatividad. Con una larga historia
de regimenes que conquistan el poder y nunca querían irse era necesario una norma que les cortará de tajo ese perverso
impulso.
Esa norma es El Referendo Revocatorio (RR). Es un camino largo lleno de trampas pero debe ser utilizado por que la resuelta y firme resolución del pueblo venezolano lo quiere así, a pesar de las trabas, de las persecuciones políticas, que no cambia por una bolsa de comida aunque se esté muriendo de hambre. Es el gran ejemplo que quiere Venezuela darse a sí misma y dársela al Mundo.
(Henrique Capriles y Leopoldo López dos líderes que como todos los que han nacido de la elección directa de Alcaldes y Gobernadores no le temen a las elecciones al contrario las proponen y las propician)
Venezuela desfallece de hambre, de falta de medicinas y infinidad de problemas pero sin embargo sigue firme en ser la dueña de su destino y lograr que se llamé al RR este año como una conquista pacífica y democrática.
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